Mareas de medianoche es el volumen de la saga de Malaz más maduro hasta la fecha.
Siguiendo la tónica habitual, uno sí uno no, éste tomo es de gran calidad.
Erikson usa en esta ocasión a dos tríos de hermanos para narrar lo sucedido y
aparecen algunos de sus mejores personajes, con especial mención a Tehol y su
criado Bicho. Opta por algo que nunca nos ha ofrecido que es el sentido del
humor. Pese a narrar historias duras en una sociedad cruel, rebaja el tono con
algunos de los momentos más divertidos que recuerdo en algún libro.
Portada de la edición española |
El
dios Tullido tiene un nuevo paladín, Rhulad Sengar, el menor y menos capaz de 3
hermanos. A través de una espada el Tullido lo controla y le permite resucitar
cada vez que muera volviendo más fuerte que antes. Los Tiste Edur crearán un
imperio bajo su mando al que deberá resistir Lether, lugar dónde viven los
hermanos Beddict. La guerra entre Lether y Edur llevará a los personajes a
situaciones límite, dónde nada es lo que parece y en la que varios dioses
venidos a menos tienen muchos intereses contrapuestos.
Lo
bueno del libro es la capacidad de sorpresa. Nada es lo que parece y todo el
mundo es más de lo que afirma ser. Otro punto a favor es la capacidad
humorística de Erikson, destilada con cuentagotas en las entregas anteriores.
Sólo por las escenas de Tehol, especialmente sus diálogos con Bicho, ya vale la
pena leer el enorme tomo. Mientras que en el 2º y 4ª libro debías sacar fuerzas
de flaqueza para acabarlos, ésta novela se te hace realmente corta. Es
brillante y lo mejor de Erikson hasta este punto. Gran novela y gran escritor.
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