El primer Ted tuvo su gracia. Se salía de la
clasificación para todos los públicos como no podía ser de otra manera al ser
un producto 100% Seth McFarlane (director, guionista y voz de Ted). Era
irreverente, malhablada y picante. Ted 2 intenta conservar su herencia pero
peca de repetitiva y ya no sorprende. Se hace larga, cosa impensable en una
película de estas características.
Imagen oficial de Ted 2 |
Ted descubre que no tienen rango de
humano/persona y lucha en el juzgado para conseguirlo. Pierde y Hasbro pretende
secuestrarlo aprovechando que es un delito menor (hurto en lugar de secuestro)
para saber qué hay en él y poder crear el juguete definitivo.
Recuerda a Torrente por lo soez y los
innumerables cameos de "amiguetes" del director (Tom Brady, Jay Leno,
Liam Neeson y, cómo no, Sam J. Jones, entre otros muchos). Sigue teniendo algún
chiste memorable pero tiende al aburrimiento. Ya no se trata de esa película
fresca y diferente si no que es una copia burda de la primera sustentada en el
famoseo. Sólo deberías verla si no tienes nada mejor que hacer.
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