Cuesta mucho arrancar una marca. Cuesta aún más
que sea reconocible, respetada y que cuente con incondicionales. Tras su
primera temporada eso es lo que consiguió True Detective. Es curioso cuán fácil
es malgastar el rédito conseguido en tan sólo 8 episodios. La segunda temporada
ha sido lamentable, tediosa y muy mala.
Imagen oficial de los protagonistas |
Frank Semyon era un gánster que tras varios
éxitos decide ser de la alta sociedad. Se mete de cabeza en negocios
inmobiliarios y recalificaciones a base de sobornos pero en su momento cumbre,
tras entregar una fortuna a su intermediario, lo pierde todo. Su socio es
asesinado y su fortuna desaparece obligándolo a volver al mundo del crimen. Los
policías con peor expediente son enviados a investigar el crimen, ya que éste
implica a poderosos y ricos, tratando de que no salga adelante, pero
sorprendentemente estos policías se verán obligados a investigar la verdad por
una serie de circunstancias imprevisibles.
Esta temporada no tiene nada que ver con la 1ª.
Lo que quedó en el tintero no volverá. La trama, los personajes y su mundo
están muy alejados del de Rusty. Mal principio para los que esperamos con las
perspectivas por las nubes. En infinidad de ocasiones intenta autoplagiarse
pero no lo consigue y afea aún más el resultado. Además, la historia recuerda
en muchos momentos a algunos compases de Life -atracos realizados por policías
corruptos, niños desaparecidos, …-, pero sin la gracia de ésta.
Los actores lo intentan. No hay ninguno que
desentone, pero la serie y su trama es tan mediocre que es imposible salvarla.
El guión es inconexo y su origen infantil y penoso. El director y el guionista
intentan mantenerla a flote a base de escenas sórdidas y pasados oscuros, pero
es imposible. Cuando las piezas no encajan intentarlo a golpes es innecesario.
Sólo puede salvarse el 4º capítulo. Se da un
tiroteo bastante interesante. Es visualmente atractivo y aporta un mínimo de
clase a una serie que a esas alturas ya está KO. En general, es una mala
temporada que deberían haber titulado con otro nombre. Se mantuvo en parrilla
por su escaso número de capítulos y su denominación de origen. De no ser así
resultaría incomprensible. Mala segunda temporada para una franquicia que queda
tocada de muerte. ¿Sobrevivirá?
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