Hank Moody nos abandona, o eso dice. La séptima temporada de
Californication se anunció como la última, dado que David Duchovny se pasa a
Expediente X de nuevo. Es una pena, Moody es nuestro golfo favorito.
Californication es totalmente diferente a lo que hayas visto hasta ahora. Es
una serie deshinibida, fresca, divertida y con escasas pretensiones.
Imagen oficial de la serie |
Nos narra una historia de amor imposible entre un vividor
adicto al caos y una chica normal que quiere una vida corriente. La séptima
temporada no sorprende, de hecho es bastante lógica. Si has sido el hombre más
promiscuo de LA ¿qué puede pasar? Que descubras que tienes un hijo adolescente
que no conocías. Si has trabajado como escritor, guionista de cine y compositor
y has cerrado todas tus puertas ¿en qué trabajarás? En TV…
Levon ha sido un gran descubrimiento como hijo desconocido.
Está pasado de rosca, tanto o más que Moody, y se echa a la espalda la mayoría
de momentos gloriosos. Becca no participa de la temporada, cosa de agradecer, y
los Runkle vuelven a estar casados en un momento difícil económicamente, cosa
que llevará a situaciones desternillantes.
Guardaré gran recuerdo de esta serie. Me he divertido mucho
con ella y me ha permitido ver horas de tele sin que me resulte empalagosa o
pesada. Es curioso ver como un adicto al caos como Moody es el más estable de
la serie. Es agradable ver como se relativizan problemas graves y se ven las
cosas desde un punto de vista más relajado. En definitiva, un clásico de la
comedia ligera que, por cierto, baja el telón cerrando muy bien todos sus asuntos pendientes.
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