Kingsman está basada en el cómic de Mark Millar. Para
aquellos que no sepan quién es, Millar es el creador de Kick Ass, Authority o
el viejo Logan. Es un guionista tendente a que sus personajes hagan uso de la
violencia extrema con fines puramente recreativos. Le va el morbo y las muertes
cuanto más absurdas mejor. Y ese sería el resumen de Kingsman: muchas muertes,
violencia extrema y mucho humor negro.
Imagen de la web oficial |
Los Kingsman son agentes secretos sin filiación conocida.
Son como James Bond: listos, ligones, con clase, excelentes luchadores y con
infinidad de cacharritos que camuflan armas letales. Se dedican a salvar el
mundo y son elegidos tras durísimas pruebas. Galahad, el mejor Kingsman, comete
un error durante una misión, cosa que causa la muerte de su compañero al
intentar salvarle la vida. Éste dejará huérfano y viuda, con lo que Galahad siente
que les debe algo. Gary Unwin -el huérfano- toma malas decisiones en su vida y
va por mal camino, así que Galahad lo recluta para ser un Kingsman. La película
nos mostrará el entrenamiento y su primera misión con objetivo salvar el mundo.
El film no muestra nada que no hayas visto ya. Recuerda
mucho a los Ángeles de Charlie, por sus escenas de acción extravagantes y su
historia absurda. Lo que la hace diferente es la forma de contárnoslo. Es una
historia muy Millar. Contiene grandes dosis de violencia explícita pero
divertida. Hay mucha acción y poco guión. Como película en sí tiene poco que
decir, pero vale la pena verla por algunas escenas de acción. En condiciones
normales es una película que olvidarías en apenas unos días, pero por dos
escenas en concreto (la masacre de la iglesia y el God Save the Queen) ya vale
la pena ver las dos horas de metraje.
Si te gustó Kick Ass deberías verla. Está muy en su línea.
No esperes grandes cosas pero no se te hará pesada. La escena de la iglesia es
una de las mejores escenas de lucha que recuerdo en mucho tiempo y ya hace que
valga la pena pagar una entrada. Por lo demás, mucho actor famoso Colin Firth,
Mark Strong, Michael Caine y, por supuesto Samuel L. Jackson (¿eres capaz de
decirme una película en la que no salga este hombre?) y grandes efectos
especiales. En resumen, se trata de entretenimiento sin muchas pretensiones.
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