Person of Interest

Person of Interest es una serie que parte de una idea original de Jonathan Nolan -gionista de la serie- y J. J. Abrams. Trata sobre Harold Finch, un genio informático, que tras el 11S recibe un encargo del gobierno de los Estados Unidos. Debe crear una máquina capaz de conectarse a todas las cámaras y ordenadores del mundo para poder vigilar amenazas terroristas, de forma que sean desarticuladas antes de que se cometan atentados.

Imagen tomada de la web oficial de la CBS

Este encargo conlleva varios dilemas morales (libertad individual, qué es una amenaza y qué no, ...) y el más importante de ellos es qué hacer con aquellos casos que no son catalogados de terrorismo pero impliquen muertes y delitos graves -los no relevantes para la Máquina-. Harold decide que él se hará cargo de estos casos y para ello necesitará contar con la ayuda de John Reese, exagente de la CIA y de la inteligencia norteamericana, que hará las funciones de brazo ejecutor.

La primera temporada planta las bases de la serie. Hay mucho de acción -bastante bestia, por cierto- y tramas sencillas. Es muy entretenida y poco profunda. Mucha acción y poco argumento, pero destila gota a gota lo que será la serie en las siguientes temporadas. Imprescindible si pretendes seguir la historia.

La segunda temporada es sencillamente genial. Se descubre una trama, llamada HR, de la policía de Nueva York, con decenas de agentes corruptos, además de existir una segunda historia principal puramente relacionada con la Máquina y su futuro rival, Samaritano. Aparecen varios personajes excelentes (Elías, Root, Nathan, ...) y es muy policíaca. Serie negra de muy buena calidad. De lo mejor de los últimos cinco años, buena y amena.

La tercera temporada es genial mientras sigue la trama de HR, el resto sobra. A partir de ahí, no aporta gran cosa y lo único a destacar es el personaje de Root. Aparece la agente Shaw, que no merece estar en la serie y pese a ello acaba teniendo uno de los papeles principales. Temporada para olvidar desde su ecuador.

A fecha de hoy se ha emitido media temporada de la cuarta. De momento va por muy buen camino. Ha vuelto al cine negro, con una nueva trama mafiosa (Dominic contra Elías), que es dónde la serie gana muchos enteros,  y detalles de la guerra fría de Samaritano contra la Máquina. De momento está cogiendo impulso para ponerse a la altura de la segunda temporada -espero-. Es curioso ver cómo Person of Interest mejora más con las tramas mafiosas secundarias en lugar de con la historia principal de la Máquina.

En líneas generales, la serie es muy buena, pese al resbalón de la tercera temporada. Los personajes son muy interesantes y con buen trasfondo -bien definido y que encaja en la serie-. Michael Emerson y Amy Acker aportan gran calidad interpretativa y la BSO es excelente. Los capítulos tienen la duración justa y las tramas se desenvuelven correctamente. Gran serie, en resumen... en especial su segunda temporada.