Predicador

Garth Ennis es un guionista bastante cansino. Todos sus cómics son exactamente iguales. Su Castigador es igual que Butcher de The Boys o igual que su Juez Dredd. En todos su guiones hay sexo, violencia extrema y morbo enfermizo. No sé si sólo será mi caso, pero me sucede lo mismo con Mark Millar -escoceses ambos-. Dicho esto, Predicador es igual que todas sus obras, pero al menos fue la que sentó las bases, la más original de ellas.

Portada del primer número tomada de la web de ECC

Jesse Custer es un predicador de pueblo que es poseído por Génesis, entidad nacida de la unión de un ángel y una demonio. Esto lo dota de un poder superior al de Dios y decide buscarlo para que rinda cuentas por el estercolero de mundo que ha creado. Dios decide entonces esconderse y abandonar la creación. En su búsqueda, Custer encontrará rivales que pretenden frustrar sus propósitos (el santo de los Asesinos, el Grial, ...).

En general es un buen cómic. Es divertido, irreverente y mordaz. Personalmente odio el estilo de Dillon -dibujante terriblemente mediocre -, pero reconozco que dota de buen ritmo la narración. Los personajes son realmente buenos. Todos son imprescindibles y siempre aportan algo. La historia divaga durante bastantes números, sin criterio aparente a veces. Ennis tiene muchas buenas ideas que no sabe relacionar entre sí.

El tebeo tiene tendencia a exprimir el morbo. A veces, es un tanto inquietante que un guionista tenga cierto tipo de cosas en su mente. Tiende a la exageración de la violencia -siempre desde un punto de vista morboso-. Hay capítulos realmente enfermizos -zoofilia, prostitución, endogamia, tortura, ...- pero siempre con toques de excelente humor negro.

El tono general de la obra es distendido. Te ríes un montón. Irreverente y gamberra serían sus adjetivos más adecuados. Es muy violenta y explícita. Los personajes son en ocasiones brillantes y, por cierto, hay infinidad de ellos. Si te gusta el cine de Tarantino, los cómics de Frank Miller o las películas gore, te gustará Predicador. Si buscas héroes a la antigua, tíos con superpoderes para hacer el bien o caballeros de brillante armadura, este cómic no es para ti.