lunes, 14 de septiembre de 2015

Jurassic World

No me gustaron las anteriores entregas de la saga pero he de reconocer que Jurassic World sabe lo que se hace desde el minuto uno. Tiene ritmo y mantiene el gancho que hizo famosas a sus predecesoras. Es visualmente atractiva, vibrante en todo momento y huye de la historia de amor empalagosa. Resulta entretenida y, pese a sus dos horas de metraje, no se hace pesada.

Imagen oficial de Jurassic World


Se vuelve a abrir el parque con nuevo gerente. Los dinosaurios ya no impresionan a nadie y la afluencia no compensa los gastos. Para evitar la caída en los ingresos hay que "estrenar monstruos" cada cierto tiempo y se están creando nuevas especies cruzando unas con otras. El nuevo dinosaurio, un bastardo muy malote, escapa y pretende acabar con todo cuanto se encuentre.

Como se observa en su resumen, la dinámica sigue la misma que la primera entrega. Algo sale mal y los bichos escapan matando cuanto encuentran a su paso. Esta vez el dinosaurio piensa y disfruta realizando una carnicería. Lo que más me gustado ha sido cómo see evitan las escenas más farragosas sentimentalmente hablando. Las relaciones humanas importan menos que antes y se pasa de puntillas sobre ellas. Sobran algunos momentos, como por ejemplo que el más pequeño llore por un divorcio de sus padres en un momento que ni siquiera encaja, pero en el montaje se dieron cuenta y evitaron el abuso de este tipo de escenas.

Hay un buen reparto y un presupuesto para FX alto. Te regalan mucha acción y los respiros son escasos, manteniendo el ritmo alto en casi toda la película. Parece un regreso al cine de aventuras de los 80, con una historia de amor residual y unos niños que simplemente ambientan un poco. En definitiva, se trata de una buena película de las de palomitas y refresco. Es amena y entretiene bastante, así que puedes dedicar dos horas de tu tiempo a verla.

No hay comentarios: