Dreamworks cuida mucho la calidad gráfica de sus dibujos.
Los paisajes son una pasada, los movimientos fluidos y las texturas muy conseguidas.
Hace películas tremendamente entretenidas, dirigidas a niños, pero consiguiendo
que los adultos pasen un buen rato en el cine. Saben cuál es el producto que
quieren vender y lo hacen bien.
Cartel oficial extraído del portal de Dreamworks |
No hay ni un pero en la estética, pero al final cansa el
contenido. Todas me parecen iguales: Kung Fu Panda, Shrek, Madagascar, ... En
todas ellas el protagonista tiene que encontrar su lugar. Siempre lo acompañan
personajes extravagantes y todas las situaciones son cómicas -incluso las
trágicas-. Tengo que reconocer que hacen bien su trabajo. No puedes ponerles
pegas, pero como ya he dicho deberían variar el registro.
En Cómo entrenar a tu dragón 2 la trama es similar a la primera entrega: los dragones son
esclavizados por el malo y los niños protagonistas deben ayudarlos para que
humanos y dragones convivan en paz. Como ya no son tan niños, ya son
adolescentes, deben respetar su nueva condición y adquieren obligaciones que
antes no tenían... y poca cosa más.
Un producto de calidad audiovisual alta, pobre en contenido
y muy divertido. Ideal para un domingo por la tarde en que no tengas ganas de
pensar demasiado. Pasas un buen rato y después a pensar en otra cosa. Si la ves
con niños es ideal, un producto muy neutro y pensado para ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario