The Wire

Seguramente habrás buscado "mejores series" en Google. Casi siempre aparece el mismo listado: Breaking Bad, GoT, los Soprano y, ¿cómo no?, The Wire. The Wire trata sobre el mundo de la droga en las calles de Baltimore. Enfoca el tema desde el mayor número de ángulos posibles, dando el punto de vista de los traficantes, policías, niños, políticos, periodistas, drogadictos y sociedad en general.

Wallpaer tomado de la web de HBO

Es una serie que comenzó su emisión en el año 2002 y duró 5 gloriosas temporadas. Es decir, cuando te enfrentes a ella olerás su aroma antiguo, casi de museo, y, por supuesto, su ritmo narrativo no es como el actual. Es muy lenta y hay que tenerle paciencia hasta cogerle el pulso. Eso sí, la recompensa es enorme. Merece estar en el podio de las mejores series.

Como hilo argumental, Jimmy McNulty es un detective de homicidios que está harto de ver cómo los traficantes y sus secuaces salen siempre impunes de los juicios por asesinato. Convence a un juez de que el sistema no funciona -sobornos, muerte de testigos, corrupción, ...- y que será necesaria una unidad especial. A partir de ahí, la serie relata cómo se investiga en la realidad a los traficantes -nada de héroes solitarios con pistola- y cómo éstos tienen al sistema en su bolsillo.

La primera temporada nos contará el funcionamiento general de la unidad y las dificultades que comporta montar una escucha, además del desinterés de los altos mandos a la hora de resolver crímenes que perjudiquen sus estadísticas departamentales. También veremos el punto de vista del delincuente común -los camellos- y los grandes capos. La segunda temporada desgrana la logística oculta y cómo entra la droga en el país, a través de los muelles y unos estibadores corruptos por sus sindicatos. La tercera nos contará la visión de los niños y la dureza de las calles de los barrios bajos. La cuarta temporada muestra las luchas de poder entre políticos y su imposibilidad de cambiar el sistema. Y por último, la quinta, cierra las trama con un excelente y realista final.

Es una serie muy dura en algunos momentos. Existió un enorme trabajo de documentación previa que refleja la realidad pura y dura. No es una serie para todos los públicos, ya que por un lado es bastante antigua -no todo el público la aceptará igual- y por otro, hay que tener estómago en algunas escenas.

Los personajes son fascinantes y sus actores brillantes. No recuerdo ninguna otra serie que haya dado tantos actores que sigan trabajando con asiduidad: tenemos al comisario Rawls, que ahora es Carmine Falcone en Gotham, a un Stringer Bell que guarda la puerta de Asgard en Thor 1 y 2 o a un Thomas Carcetti que pasa a ser Meñique en Juego de Tronos, por poner unos pocos ejemplos. Un ejemplo de brillantez fue basar la mayoría de personajes en personas reales y mezclarlos con gente cogida de la misma calle y sin experiencia interpretativa -como Snoop, por ejemplo-. Dudo que yo mismo llegue a olvidar a personajes como Omar, McNulty, Marlo o Chris, entre muchos otros.

En resumen, se trata de una serie de gran profundidad, con un argumento excelente y muy realista. Cuenta con grandes actores e interpretaciones geniales. Televisión de alta calidad para un espectador exigente. Como contra tiene que ya ha pasado mucho tiempo desde su estreno y su ritmo no se adapta bien a lo que estamos acostumbrados. Pese a todo, yo le doy un 10.